La izquierda con dios y el diablo,
cuanto más lejos de Marx mucho mejor
Sólo el ganado no tiene la oportunidad
de cambiar de opinión, dice el dicho. Pero la metamorfosis del pensamiento
imperialista es sólo eso: oportunismo derechista puro y duro. Ese que mantiene
a las derechas en el poder, el poder del capital, sea bajo la brutal doctrina
del neoliberalismo contra los pueblos, sea ocupando cargos luego como
profesores, escuchen: de Desarrollo Sostenible, asesorando a la ONU como
especialistas para los Objetivos de Desarrollo del Milenio.
¿Será casualidad que sea Pascual
Serrano, jefe de Rebelion.org, el que lleva hoy (08.09.2013) a su primera plana
en cabecera, el sitio de mayor destaque, al 'economic killer' designado por el
FMI para destrozar las economías latinoamericanas en el apogeum del
neoliberalismo en el mundo, a Jeffrey D. Sachs?.
La guerra yanqui por un orden
imperialista trasatlántico, avanzada contra los pueblos árabes y hoy enconada y
decisiva contra Siria, se pinta de colores en la izquierda. Todo cabe en la
olla hirviente.
Si algo nos habla sobre el nivel de
corrupción moral y plegamiento a los EEUU de la burocracia burguesa apropiada
de la administración política de la ONU es precisamente el emblemático caso de
la designación de Jeffrey D. Sachs en el bien remunerado cargo arriba citado. La desvergüenza burguesa no
tiene fondo, cuando, en vez de asignarle a los agentes del imperialismo en
retribución por sus servicios algún cargo burocrático inadvertible en un
organismo supuestamente rector de las relaciones internacionales, se les pone,
para insulto de los pueblos ahí representados, en cargos de influencia sobre el
desarrollo sostenible.
El neoliberalismo, esa fase brutal del
capitalismo financiero, se diseña en Monte Pellerin como la doctrina capaz de
hundir toda idea sobre el desarrollo sostenible socioeconómico. Por supuesto,
habrían de sufrirlo en carne propia los pueblos, los asalariados de todas las
latitudes, pero especialmente los del llamado tercer mundo. Como mezquinos
alquimistas con M. Friedman a la cabeza crean la llamada Escuela de Chicago,
riegan dinero a manos repletas para apalancar la ideología del capital como
única fuente de riqueza, para los ricos, y esperan la coyuntura que los lleve
al poder en los EEUU. R. Reagan y M. Thatcher toman las riendas gracias al voto
ganado por la formidable fuerza de su poder ideológico sobre las masas y
comienza la arremetida contra las masas.
Pero los mezquinos artífices de la
doctrina han de asegurarse del triunfo impactante de la nueva era del capital.
Chile va a ser el laboratorio. El sangriento golpe de estado de la oligarquía
chilena contra Allende auspiciado por los EEUU, seguido de la tiranía de
Pinochet caen del cielo como el laboratorio ideal. Para que la doctrina del
shock neoliberal resulte hay que demoler los sindicatos, ponerles las botas en
la cabeza a la clase obrera y soltar a los perros de presas sobre los
conejillos de indias. Uno de esos brillantes perros de presas económicas,
abanderadas del neoliberalismo al servicio del FMI, conocidos como economic
killers, es precisamente Jeffrey D. Sachs.
Este asalariado del imperialismo yanqui
en la nómina del FMI se destaca como consejero de los gobiernos liberales
entonces en América Latina. Como el padre de la familia Corleone en la Cosa
Nostra, arriba a Bolivia con una “oferta irrechazable”, el paquetazo
neoliberal, ese que deja a los bolivianos con una mano delante y otra detrás -
como diría el Ché. Ha hecho falta sangre, sudor y lágrimas para que Evo Morales
tomara el poder y con la doctrina anti neoliberal de ‹la economía ha de servir
a los pueblos no al capital› pusiera a Bolivia solo entonces sobre los rieles
del desarrollo socioeconómico sostenible. El indígena contra el graduado de
Harvard, ¿quieren los izquierdistas de este planeta mayor simbolismo
revolucionario contra el capitalismo en cualquiera de sus formas?
Encumbrado por los medios imperialistas,
los yanquis y los europeos, todos al servicio del capital financiero y su
ofensiva devastadora sobre los trabajadores, el ekonomic killer sale de
Latinoamérica, con la misión del FMI de comprar con espejitos de colores las
“revoluciones” anti comunistas que están haciendo caer el muro de Berlín.
Aterriza, dónde si no en Polonia. Las elites del partido comunista, llamado
Partido Unificado Obrero Polaco, y las elites del movimiento sindical
Solidaridad le compran la mercancía. Y en una noche en una suit del hotel
Marriot de Varsovia escribe tres versiones del plan de choque neoliberal que ha
de ponerse en práctica. Los polacos le compran la versión más radical, lo que
no deja de llamar la atención del enviado de dios. No se le escapa a Noami
Klein el caso polaco en su sonada Doctrina del Shock.
El precio de la transacción estaba
predeterminado. En menos de diez años, ya para el 2007, ex comunistas y ex
sindicalistas ahora juntos en el poder han vendido cerca del 70% del patrimonio
económico nacional, industrias y bancos, al precio de remate del 10% de su
valor a transnacionales gringas y europeas en esencia. Entra la economía de
mercado a todo vapor. Cunde la ley de la competencia tipificada por Marx, en la
práctica experimentada como la carrera de ratas por el éxito y la tasa de
ganancia. De la noche a la mañana Polonia se convierte en uno de los mayores
reservorios de mano de obra barata, y relativamente calificada, para el capital
internacional. En el 2001 el PIB cae estrepitosamente y el desempleo salta al
20%. Hasta hoy se mantiene de manera crónica en alrededor del 13%. En el 2012
el 27% de los niños padece mal nutrición. En el umbral de la pobreza se
encuentra no menos del 60% de la población, en la pobreza extrema el 15%. Leyes
como la del desahucio cobran vida donde antes no la había. La medicina y la
educación ruedan calamitosamente por los suelos y hoy no se detienen cuesta
abajo en su corrida. El PIB se recuperó para que la concentración de la riqueza
deje al 10% de los polacos con el 50% del producto en sus bolsillos. Gracias a
los fondos de la UE para los nuevos miembros la economía no ha colapsado. La
doctrina liberal campea a sus anchas. El estado se derechizó y manda el capital
por encima del trabajo.
Si no se es capaz de advertir que cuando
esa guerra económica del capital contra los pueblos topa con la resistencia de
una masa crítica que no aguanta más, la única forma que tiene el capitalismo
monopolista transnacional es la guerra militar, y si no se es capaz de advertir
que la guerra imperialista que desde hace más de dos años los yanquis le
imponen a Siria es una expresión clara de la reproducción del capital mediante
la desposesión, a todo coste social, entonces que cierren sus portales
virtuales las izquierdas.
Rebelion.org relanza con bombo y
platillo, cual caja de resonancia del imperialismo, un artículo, cómo no,
políticamente correcto de uno de los sicarios económicos más connotados de las
oligarquías trasatlánticas. Justamente un artículo sobre Siria, con el cínico
título de “Contraorden contra las bombas de los EEUU”[i]. Como si las bombas de profundidad económica con que este sicario a la
orden de los EEUU minó las economías nacionales contra los pueblos hubiesen
sido y fueran menos devastadoras. Miles de millones de personas, niños y
mujeres entre los más afectados, mueren hoy literalmente de hambre y de sed,
aniquilados por la doctrina neoliberal del capital. Esa guerra silenciosa es la
que le conviene al imperialismo yanqui y europeo porque hace menos ruido. ¿Se
escaparán a la justicia de los pueblos sus perpetradores, como antes los nazis
huyendo por el mundo y cambiando sus identidades, como hoy la cambia Jeffrey D.
Sachs?
Si del propio artículo políticamente
correcto que Rebelion.org empuja se trata, no hay que aguzar los sentidos para
advertir la ponzoña pro imperialista yanqui en la mente genéticamente
modificada de los adláteres del capital. Véase en una idea clave de Jeffrey D.
Sachs. “En cambio, los EE.UU. deben presentar pruebas de los ataques con armas
químicas a las NN.UU., pedir al Consejo de Seguridad que condene a los
perpetradores y remitir esas violaciones a la Corte Penal Internacional.
Además, el gobierno de Obama debe intentar colaborar con Rusia y China para
imponer la aplicación de la Convención sobre las Armas Químicas. Si los EE.UU.
fracasan al respecto, al actuar diplomática y transparentemente (sin un ataque
unilateral), Rusia y China se encontrarían mundialmente aisladas respecto de
esa cuestión importante”.
Rusia y China son los estados que desde
un comienzo han plantado cara a la arremetida yanqui contra toda forma de
solución política del conflicto sirio. ¿Cómo es que Rusia y China se
“encontrarían mundialmente aisladas respecto a esa cuestión importante” que nos
devela iluminadamente J.D.Sachs? ¿A qué Corte Penal Internacional convida
J.D.Sachs a los EEUU cuando ellos mismos se niegan a someterse a la
jurisdicción de dicha Corte para mantener en la impunidad sus crímenes de lesa
humanidad? ¿Acaso no han presentado ya los EEUU sus falsas pruebas sobre los
ataques químicos en el reciente informe de sus servicios de seguridad, las
cuáles han sido desmontadas por cada vez más amplios círculos de expertos,
testigos y el propio informe ruso entregado a la ONU? ¿A quién se le impondrá
la Convención sobre las Armas Químicas, como no sea a todos los países de la
región, incluido Israel que no la ha ratificado, y no solo a Siria, tal como lo
viene proponiendo el Gobierno de Assad? ¿Y, consecuentemente, se desmontará el
potencial ilegal de bombas atómicas de Israel - al contrario de Irán, negado el
estado sionista a una sola visita de la OIEA - con que amenaza a todos los
pueblos árabes de la región? ¿Por qué nos dicen A los sofistas derechistas sin
llegar a decir nunca Z?
Si la honestidad intelectual y la
militancia de izquierda le hubieran dado a Rebelion.org para siquiera en la
referencia sobre al autor del artículo sobre Siria, destacar no solo la gloria
que el orden derechista le adjudica, sino el rol contra los pueblos de este
camaleón neoliberal, estaría salvando por lo menos la llamada honrilla de la vergüenza.
Pero aún para eso ha faltado “tinta”. ¿Rectificar será de sabios también en la
izquierda comprometida?
Hay quienes en la izquierda siguen
pensando que la guerra del capital contra el trabajo la seguiremos viendo solo
en los televisores, mirando a los indignados de España o a los sublevados de
Grecia en los estelares de las 9 de la noche, cómo son apaciguados y metidos de
vuelta en la Lámpara de Aladino.
Con el ser o no ser de Siria,
independiente, soberana, democrática, anti imperialista y anti sionista, se
decide el fin o la avanzada de la hegemonía yanqui y atlantista en el mundo.
Esa es la altura de la varilla por un mundo realmente mejor.
He
buscado el artículo lo pongo aquí Contraorden
para las bombas de los Estados Unidos
Entrevista
con Clarissa Ward, de CBS News este
artículo pertenece al artículo anterior
rebelion.org vocero del neoliberalismo
imperialista en Siria
Leer los comentarios del artículo, el artículo de rebelión lo
han desactivado.
Este periódico digital no
admite artículos críticos con el 15 M, se llevó dos años una sección para
artículos para los que defendía el 15M, y en el mismo espacio la sección a las
revoluciones en el mundo árabe aquí se puede ver.
Como he demostrado en muchos
artículos en este blog que son
revoluciones de colores, el 15M como revoluciones en el mundo árabe o primavera
árabe,
Pascual Serrano, jefe de Rebelion.org
Estar en contra de un bombardeo de la
OTAN o una invasión estadounidense no significa que se defienda al régimen de
Asad
Pascual Serrano 30-08-2013
Siria y la
obsesión geoestratégica
Por Leila Nachawati
Esta facha hace referencia al
artículo de Pascual Serrano
El 'déjà vu'
sirio
Siria y las falsas dicotomías
Campaña española de
ayuda urgente a Siria
24.02.2012 ·
La Asociación de
Apoyo al Pueblo Sirio
Destapando a la Asociación de Apoyo al Pueblo Sirio y el
terrorismo mediático sobre el conflicto en Siria.
Leila
Nachawati
15M.cc - conversación
con Leila Nachawati
Internet, otra herramienta para la revolución
Siria y
la izquierda políticamente correcta
¿De qué vale la cobardía política en
tiempos del cólera?
El cólera imperialista avanza y deprava a pueblos y regiones enteras.
¿Habrá que demostrar en algún evento científico para reafirmación de las
izquierdas de salón que el África agoniza por el cólera imperialista yanqui, en
primer lugar, seguido por la yuma imperialista europea? ¿O qué la cruzada del
Occidente judeocristiano contra los pueblos árabes no cesa hasta hoy?
Un momento. ¿Qué Kadafi y su revolución verde rompen el fatum de
dependencia ideo-política con que los brazos armados del imperialismo yanqui y
el europeo, militares y económicos, mantenían sin chistar bajo la bota a los
pueblos árabes? ¿Qué el movimiento panarabista lidereado por Abdel Nasser y las
corrientes del Partido Baath Árabe Socialista con Saddam Husein en Irak como
uno de sus valuartes trastoca la hegemonía imperialista en la región? ¿Qué
Siria quedó, hoy con el liderazgo de Assad Jr., como el único estado árabe de
consecuente posicionamiento anti imperialista y anti sionista del Oriente? ¿Qué
las oposiciones internas que mantenían a raya estos regímenes han sido
precisamente las utilizadas junto a mercenarios y a fuego de la OTAN para
implantar ahora regímenes pro-yanquis? ¿Qué los cambios políticos democráticos
internos en estos países hubieran dado al traste con los intereses imperialistas?
No, no. Los crueles dictadores árabes, grita la izquierda tras la gritería
de la derecha, han de morir como perros. Para legitimarse como izquierda
políticamente correcta no pueden dejar un texto que salga de sus manos sin el
aseguramiento que les proporciona la condena a los crueles dictadores que, como
hoy Assad, han de morir en las hogueras.
Revísense los escritos de Pascual Serrano – hoy uno de ellos en Kaos
con título afrancesado “El déjà
vù sirio” - o los del notorio Santiago
Alba Rico, para constatar cómo, si no a la entrada pues a la salida de
las elucubraciones sobre los regímenes que han de morir por las bombas yanquis
y europeas – de qué otra forma podrían hacerlos desaparecer - se encaja la
coletilla “no es que estemos de acuerdo con esos régimenes, es que...”.
Y aquí se enganchan los párrafos sobre el derecho internacional y la
ilegitimidad de los ataques de la oligarquía internacional contra los pueblos,
en este caso, árabes. Así, alejado el cargo de conciencia, se desarrollan los
panfletos izquierdistas desde la cobardía y la hipocresía ideológica.
Cuando estos dos autores – por tomar apenas dos ejemplos – se declaran
amigos y defensores de la revolución cubana, no dudan en compartir su
beneplácito con ideas y políticas de esa revolución que a todas luces ha venido
devorando a sus propios hijos. Para mantenerse entre los reconocidos leales por
el PCC y el Gobierno cubano hacen de tripas corazón y “entienden” que la mejor
forma de ayudar a la revolución es callarle la crítica que destroce en menudos
pedazos el camino de la contrarrevolución por el que deriva desde hace décadas
el proyecto cubano. Porque la descomposición ideológica y política de las
revoluciones no se da de la noche a la mañana, son procesos. Procesos que en la
impunidad del amordazamiento de la crítica y la democracia revolucionaria
precisamente terminan implosionando.
Por supuesto, para desasosiego de los imperialistas yanquis y europeos, no
ha sido ni es lo que va quedando de la revolución cubana, un régimen que se
haya permitido – como por ejemplo el llamado ex régimen comunista polaco –
disparar a mansalva con calibres pesados y tanques en acción contra sus
ciudadanos, contra aquellos que desde la oposición a los regímenes autoritarios
implantados por el mal llamado socialismo real, salían en protestas legítimas.
De modo que la izquierda políticamente correcta no ha tenido que lidiar con el
peso de esa cruz en Cuba. No ha tenido que inventarse las coletillas de “sí,
pero...” que se arma con los regímenes árabes que van cayendo frente a la bota
imperialista.
La revolución cubana se ha defendido de sus enemigos internos componiendo
el frente de los revolucionarios en tiempos de acosos intensivos desde afuera,
como en los mismos años sesenta, después del triunfo auténticamente rebelde del
pueblo, lo tuvo que hacer contra la burguesía sublevada en armas con apoyo
yanqui y derrotada en el Escambray (y en todo el país) y contundentemente en
Bahía de Cochinos. Y no hay predicador de libertades creíble que al mismo
tiempo pueda negarle a la revolución el derecho de defensa contra sus enemigos
internos y externos. La revolución ha sido movimiento de mayorías. No lo sigue
siendo. La deriva hacia una transición capitalista se ha implantado y en las
mayorías ya no hay consenso sobre el rumbo que debió haber sido inequívocamente
socialista. Pero los izquierdistas políticamente correctos callan y adulan la
transición capitalista que toma cuerpo en Cuba de la mano del PCC. Aquí ya no
vale la verticalidad usada contra los regímenes árabes desechables.
Libia, Irak y Siria, los regímenes detestables han sido los de mayor
desarrollo e inclusión social en aquella región. Las realidades ante las
llamadas y alabadas por esos izquierdistas correctos primaveras árabes, en
Tunesia y Egipto, todo lo contrario. A estos izquierdistas no le tembló el
teclado y no les tiembla hasta hoy para incitar a que los imperialistas tengan
luz verde en sus actuales guerras de reconquista en el Oriente.
Ha sido especialista en ello Santiago Alba Rico. Sus arremetidas
inventadas contra la izquierda militante por decir tajantemente NO a cualquier
lance imperialista en la región, como el Ché, sin confiar ni un tantito así, no
tienen paralelo en el pensamiento y la actitud de izquierda. Enredado en
malabarismos verbales seudo filosóficos no ha dudado en proporcionarle
cobertura ideológica constante al imperialismo yanqui y europeo. Con raras
excepciones en Europa toda la izquierda auto llamada centrista o
socialdemócrata, ha empujado junto con las oligarquías imperialistas el carro
bomba de las agresiones e invasiones militares al mundo árabe. Ha empujado con
regocijo el carro de las contrarrevoluciones de colores en el Oriente.
A los izquierdistas políticamente correctos la aritmética contra los
tiranos árabes no les cuadra ante el más de un millón de personas que sólo en
Irak mataron los yanquis y la OTAN. No les cuadra tampoco contra los crueles
talibanes, con los que hoy los imperialistas yanquis, después de asesinar a
cientos de miles de afganos, negocian para dejar establecida la neo colonia al
mando de los propios talibanes. No les da la aritmética a los izquierdistas
correctos contra las matanzas de libios de los yanquis y los europeos, Kadafi queda
como un tirano de tetas ante tamaños exterminios. Todo el Oriente reconquistado
por las grandes transnacionales yanquis y europeas del petróleo y la industria.
Y los izquierdistas correctos se atreven a seguir escribiendo y dando
conferencias sobre los terribles regímenes islamistas, en cuyo lugar ahora se
pueden armar elecciones para hablar de democracia representativa. Y en esto no
ven ningun déjà vù.
Liquidar la terrible teocracia de los khomeini en Irán es el próximo sueño
de los izquierdistas políticamente correctos. Ya preparan los panfletos para,
una vez devastada y tomada Siria política y económicamente por los yanquis y
sus socios europeos, acomodarles las bombas a la OTAN contra Irán con sus
discursos de cobardes.
Pero Assad y el respaldo de la mayoría del pueblo a su gobierno le han
trasnochado la corrida a los izquierdistas correctos. Sólo EEUU salva ahora a
“nuestros” izquierdistas. Con el pulgar hacia abajo esperan impacientemente los
bombazos que habrían de caer en breve sobre Siria. La crueldad del ataque
químico de Assad, curiosamente filmado y declarado por las “agencias” un día
antes de que supuestamente ocurriera, les ha venido como anillo al dedo. Qué
bien que el médico pediatra se suicida de esa manera. Auto servido - nos
convencerán también del absurdo los izquierdistas correctos - en bandeja de
plata el ataque imperialista. Después los izquierdistas contarán los muertos
con la esperanza de que las aritméticas les sean favorables con respecto a los
“muertos de Assad”. Estos izquierdistas han llegado a enjuiciar a Rusia y China
por no comportarse políticamente correcto contra Siria.
Cuánta pusilanimidad en la supuesta izquierda. Así nos va en la lucha por
un mundo contra los imperialismos, por un mundo sin capitalismo. Así nos va en
la lucha por el socialismo.
RCA
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